CASA

 Muchas veces cuando creo que tengo sueño o que estoy por quedarme dormida,

tengo las ideas mas raras que se pueden ocurrir estando completamente sobria y despierta.

Vengo de días cargados de situaciones laborales estresantes, las cuales me llevan a querer no volver a mi querido y amado trabajo en la docencia.

Hace un par de días que vengo pensando en que estoy esperando quizás de mi misma, quizás de mi vida en general o vaya a saber de que propósito en si ,ya que en el medio de  toda mi idea ese planteo aun no llego. 

Pero a lo que voy con todo esto es que me empecé a preguntar en las cosas que esperamos de los otros o de un otro y de como eso nos influye para bien o mal en nuestra cotidianidad.

Y ahí el click, deje de darle importancia a temas que no me involucran, dejo de escuchar los temas que no me interesan y no me meto en conversaciones que me incomodan, a veces sonrío pero por dentro estoy asesinando a la persona que estoy escuchando decir alguna estupidez, otras veces necesito hacer justicia (soy libra,no puedo evitarlo) y voy de frente contra viento y marea aunque me terminen rebotando los golpes. 

Aprendí a observar mas y hablar menos, por suerte puedo escribir para de alguna manera descargar mi sentir.

En una obra de teatro que vi hace unos días hablaban del destino y que clave perfecta para describir que el propósito de todas mis ideas que estoy sintiendo hoy, sea lo que me llevo a empezar a plantarme desde otro lado, ahora mas libre, sin ataduras que yo misma tenia puestas.

Hoy elijo quedarme en casa, calentitos en el sillón, quizás en silencio, mirando la tele o haciendo nada.

En casa, al fin.