Ya no soy la misma,
respiro antes de responder la mayoría de las veces,
escucho mas, reacciono menos.
Aprendí a decir algo lindo todas las mañanas, sobre todo agradecer.
Camine tres o mas pasos al costado de donde no encontraba espacio para manifestar mi deseo,
le abrí paso a mis necesidades y me perdí un poco tratando de encontrarme.
Pero gracias a eso lo logre
Cambie exigencia por compasión,
agarre al miedo y a mi cuerpo eléctrico, los siento y respiro
No quiero esa sensación lejos, la prefiero cerca
para entregarme cada vez mas,
algunas cosas son las que eran, otras las despedí, agradecí y deje en el camino
Cada tanto volverán y serán recuerdo.
La decisión es de dos, con firmeza
lo que late es invencible, el único riesgo no es arriesgarnos
en cada nos acercamos mas a lo que somos y soñamos para vivir.
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