-El deseo esta siempre en otra parte- dijiste.
Yo te llene la copa de vino.
-Es necesario equivocarse mucho para acertar muy poco - continuaste y te tomaste un trago.
Yo te mire como en la infancia.
Pense en mi obstinada manera de equivocarme, en mi ansiedad constante,
y la frustracion que me invade por sentir que no voy hacia ninguna parte.
Levantaste tu copa mirando al cielo y me sonreiste.
Pusiste en silencio a mi angustia.
Me perdone un instante,
hice la paz con mis errores,
recorde que el deseo se roza,
no se alcanza,
y que el secreto no es hacia donde,
sino con quien.
❤
Comentarios
Publicar un comentario