Cuantas veces pasaron horas siendo espejo y nunca tuve registro de pedir un deseo...
Y ahora, cada vez que el tiempo marca la hora del derecho y del revés tengo esa apurada necesidad de cerrar los ojos por 60 segundos y respirar ondo.
Y en ese momento, vos. Apareciendo ahí, otra vez. Como ese ,Hola,como estas? Tanto tiempo...
Y ese deseo que en 60 segundos tengo que pedir, termina con vos. Adentro de mi cabeza ,como una máquina invariable, como el deseo más profundo de todo mi ser. Adorarte todo lo que me de la vida.
Comentarios
Publicar un comentario